Este post va dedicado a todas las chicas que tengan una boda y no sepan qué ponerse. Para este tipo de eventos yo sigo la frase Menos es Más e intento elegir prendas sencillas y elegantes que puedan ser combinadas fácilmente.
La idea que quiero compartir es que por asistir a una boda no es necesario comprar un vestido nuevo. A mi me encanta reinventar un look con algún vestido que ya me haya puesto en otra ocasión. El truco está en jugar con los complementos, el peinado y el maquillaje. Con cambios simples, como ponernos unos zapatos de otro color o hacernos un peinado de pelo suelto si en la boda anterior llevamos ese mismo vestido con un recogido, podemos hacer un look totalmente nuevo ¡y nadie notará que hemos repetido!
En mi caso, elegí para la ocasión un vestido en color nude con escote de vértigo, adornado con multitud de flores del mismo tono y pedrería (casi inapreciable, muy discreta) y unos taconazos negros ¡imprescindibles es cualquier boda! Le di un toque distinto con mi clutch negro con apliques metalizados que me tiene enamorada.
¡Que vivan los novios!
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¿Qué os parece mi look de boda?
¡Muchas gracias por vuestros comentarios!
VESTIDO/DRESS: Etxart&Panno
CLUTCH: Zara
ZAPATOS/SHOES: Zara
GAFAS/SUNGLASSES: Zara
*Los pendientes y la pulsera fueron un regalo de un joyería local.
Rock n Glam 